Según la opinión de la mayoría de las autoridades del mundo de la arqueología, la necrópolis de Varna es hasta la actualidad, la más antigua de las descubiertas hasta la fecha en Europa.
Varna está situada en la actual Bulgaria.
El cementerio fue descubierto por casualidad, cuando se estaba trabajando en unas obras, en la zona industrial de la ciudad. Unos objetos encontrados, aparentemente de cobre, fueron motivo de curiosidad, sin pensar en la importancia que ello tenía, hasta que fueron mostrados públicamente. Los objetos no eran de cobre, sino de oro, lo que provocó el interés por continuar con el descubrimiento, aparentemente olvidado.
